lunes, 13 de agosto de 2007

Day 06: 26th JULY - PATTAYA – BANGKOK

Primer intento en el Siroco, nada.
Mercado nocturno.

Bueno, pues como no escribí notas para este día pues no me acuerdo de mucho la verdad, así que intentaré acertar, y si no que me corrija quien pueda y quiera (las notas esas del inicio las acabo de escribir ahora).

Después del maravilloso día con las motos de agua y el regateo con la policía no había ya mucho que hacer en Pattaya, una de compritas otra vez, un rato a la piscina, comer, un billar en el hotel, y tralarí tralará, poco más. Nos vino a recoger el coche, nos hicimos fotos con la gente del hotel, que eran muy majos la verdad, especialmente el tipo que llamaba al ascensor, que se ponía firme cuando ibas y chasqueaba los zapatos, tenía dos plaquitas de metal para que suene bien fuerte :D Después de eso para BKK (Bangkok) en el coche, la verdad es que ni siquiera había mirado el hotel que teníamos, pero cuando llegamos fue como, joder, este es el hotel, no creo, anda, pues sí, si está aparcando en la puerta del Holliday Inn, jopa, de los más pijines de la zona, cómo nos cuidamos, eh? Pues sí, ahí estuvimos hospedados. Los más sorprendente la cantidad de cucarachas que había, de las muy grandes. Estaba lleno de las chicas estas, supongo, que van tapadas hasta la médula, todas vestidas de negro xq su cultura y su dios y su puta madre así lo quieren. Bastante lamentable el rollo ese de humillación a la mujer, negar la identidad es casi peor que hostiarla, no? No sé, la misma mierda tal vez.

Total, que muy sorprendente ver a las señoras, señoritas o lo que fueran, no se sabe xq no se puede ver, comer, la verdad es que es muy lamentable todo el rollo, y cuando algo es así de jodido qué mejor que recurrir a la ironía y a la mofa, para que os hagáis una idea comía como el doctor Zoiber de futuraza, ponía su velo tentacular sobre el plato y comían por debajo, para tomar el zumo lo mismo, el vaso desaparecía debajo del velo misterioso y cuando salía estaba vacío… David Copperfield no lo hubiera hecho mejor que ellas.

Muy cerquita de nuestro hotel estaba el Siroco, un club de Jazz muy potito que ese día no pudimos ver porque es tan bonito como pijo, así que no se puede entrar con pantalón corto, ni de sport, ni con sandalias, ni con… .vale, ya nos vamos joder.

De ahí en Tuc-tuc, que es como el rickshaw indio pero mucho más potente, y los conductores están muchísimo más chalados, nos fuimos al night bazaar, o sea mercado nocturno, uno de ellos. Era bastante grande, ahora no lo recuerdo demasiado bien xq confundo el de Chiang Mai y este, pero eso, unas compritas, regateo por aquí y por allí, la verdad es que yo poca hostia he comprado en el viaje pero bueno, algo de ropa, un par de pijotadas, un capricho que se me jodió ayer en Hampi (para otro post) y poco más. Eso sí, me he gastado una pasta en masajes :D de momento voy uno en Chiang Mai, pero atención a los días venideros :D

Bueno, pues eso, que night bazaar y que no sé qué más, así que cambio y CORTO!!!!

Sed felices :D

SSer.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Por añadir algo a tus memorias, ése fue el día en que Robin, en el primer contacto con los mercados de Bangkok, después de regatear media hora contada de reloj y algunos minutos más en los que perdí la cuenta, consiguió... atención!!!... redoble de tambores... que le rebajaran unas zapatillas... 100 malditos baths!!! sobre el precio que había establecido la vendedora en un principio, lo que viene a significar que el pequeño Robin tuvo que incrementar constantemente su precio inicial, mientras que la vendedora,en los últimos momentos, ya de coña, rebajaba un bath el suyo...

En ese mismo mercado, afortunadamente, yo me encontré con el que debía de ser el único vendedor de Bangkok que me rebajaría el precio por debajo de lo que yo había establecido. Vamos, que él empezó por mil y pico baths y terminó por 300, cuando yo ya lo había dejado en 350...

De dónde surge esa nueva ley de la lógica? Pues muy sencillo: Cuando llega al precio que tú has establecido (350 baths), pones una cara de desgana terrible, te sientes como aturdida por el cansancio y dices con cara de "me da absolutamente lo mismo comprarte eso": "Ya no lo quiero¨, entonces, te lo rebajan a 300 baths y piensas, pues no están mal las zapatillas, de hecho ahora ya me gustan...

Moraleja para Robin: estés en el mercado que estés, elige bien la zapateria!!! :P