jueves, 16 de agosto de 2007

Day 09: 29th JULY - BANGKOK – AIRPORT

Masaje con aceite, tal vez el mejor que me he dado?
Comprar un Rolex :D
Me cagüen Air India
Pasaporte de ibon
Me siento gilipollas en la despedida

Bueno, pues último día en Tailandia, y seguramente último post sobre Tailandia, como dicen en Matrix, y como sabe todo el mundo, todo principio tiene un final, y las vacaciones se acabaron un 29 de Julio, hoy, 16 de agosto de 2007 todo aquello es sólo un recuerdo.

En fin, que nos levantamos, nos fuimos a desayunar, y no sé qué más hicimos, pero hubo un momento en que Laura y yo una vez más tuvimos la conversación de “nos damos un masaje¿?” joder, pues claro (atención, por si no os habéis percatado, en tres días en Bangkok nos dimos tres masajes :D y eso no es vicio ni nada :D

Pues nos fuimos a mirar sitios, nos fuimos a uno que habíamos estado el día anterior mirando, pero que no tenían sitio, el día aquel en que acabamos recibiendo el peor masaje que he recibido nunca, pero este día las cosas eran diferentes.

Nos fuimos al sitio este de los masajes, entramos, y para cuándo queréis, para ya :D ok, nos dieron una infusión de algo que parecía mate o similar, no estaba nada bueno la verdad, luego nos hicieron pasar a cada uno a su habitación con su masajista, la mía fue una jodida maravilla, relegó a mi ángel masajeador de Chiang Mai a un segundo puesto en mi escala de masajes recibidos, fue la hostia.

Además la chiquita era muy maja, y creo que se lo pasó bien, eso se siente cuando recibes el masaje, por ejemplo la que me dio la mierda de masaje el día anterior se le notaba que no estaba disfrutando nada, pero esta sí, era una cachonda, sonreía, se reía, hubo un momento que se quedó un tanto embobadilla jugando con el pelo de mi brazo, levanté un poco la cabeza, le miré, le sonreí, y me devolvió una sonrisa tímida de joder, que me pierdo :D una chica muy maja. Masaje con aceite por cierto, que ahora creo que es bastante mejor que el masaje tailandés o cualquier masaje de presiones, el de aceite es como más fluido todo, no sé, muy placentero. Por cierto, como dato irrelevante, esta vez volvimos al tanguita para el masaje, yo creo que es lo más cómodo para masajista y masajeado.

Después de eso estaba en la gloria, así que no recuerdo muy bien lo que pasó, amm, sí, me compré un Rolex, porque sí, señora, ahora tengo un Rolex, bueno, ahora mismo está guardado porque en Hampi se suicidó, pero eso es otro asunto. Me compré mi Rolex por 1300 Bhat, que no está mal, hay gente que por ahorrarse mil se compró una baratija de imitación, que al menos sirve para que la gente sepa distinguir entre un Rolex de verdad y uno de “invitación” (:P sólo para quien lo pille), fijaos en el segundero :D

Bueno, pues después de mi maravillosa compra que ha durado como dos semanas antes de su suicidio, nos fuimos al hotel a hacer el check out y todo eso. Nos fuimos a comer justo al lado de donde me había dado mi pedazo de masaje unas horas antes, de hecho pensé más de una vez volver a darme otro, pero eso sí que sería vicio, uno al día vale, pero dos seguidos… joder.

Pues eso, nos fuimos a comer, y de ahí vuelta al hotel para que nos recoja el coche para llevarnos al aeropuerto.

Una vez en el aeropuerto oh milagro, los indios tocando los cojones antes de llegar a su jodido país. Air India había suspendido nuestro vuelo de regreso, pues de puta madre oiga. Al final nos intentaron meter en uno de Thai Airlines, vale, pues bueno, nos vamos con estos, no pasa nada, llega el momento de dar los pasaportes (kit kat, me voy a tomar un té)

Ya he vuelto de mi té. A ver, por dónde iba… ah, sí, el momento de los pasaportes, pues nos piden los pasaportes los del mostrador de Thai, y empezamos a sacar pasaportes… todos….? NO! Una aldea poblada por irreductibles galos resiste ahora y siempre al invasor… uys, que me pierdo, bueno, pues eso, que empezamos a sacar pasaportes y de repente Ibon mala cara, joder, qué pasa? Creo que es la primera vez que le he visto así de chungo, se había dejado el pasaporte en la mesilla del hotel, sabía exactamente dónde, pero en el hotel.

Así que llamamos al hotel, a ver si podían traer el pasaporte, porque no daba tiempo a ir y volver. Mientras tanto Rubén, Laura y yo haciendo todo lo necesario para el vuelo de Thai Airlines, check in, facturar maletas y tal, no había mucho tiempo. Total que entre una cosa y otra Oiane, Zarra, Quinta e Ibon se quedaron en el aeropuerto a ver si llegaba el pasaporte y conseguían hacer algo y Laura, Rubén y yo para el avión. En la despedida, o la NO-despedida me sentí un poco gilipollas, bueno, no en ese momento, porque ni siquiera me di cuenta, con las prisas, con el tipo de Thai diciendo venga, que perdéis el avión y tal y cual, y todo a toda hostia, cuando estaba por fin sentado en mi asiento en el avión pensé, joder, ni siquiera me he despedido, soy un puto gilipollas.

Bueno, pues entre la NO-despedida y estar sentado en el avión un par de costias, primero percatarnos de cómo se pierde la forma física en India y tras siete meses sin hacer NADA de deporte prácticamente, tuvimos que ir corriendo hasta la puerta de embarque, joder, qué quemada, qué sudada, no podía, Rubén sí, que juega a fútbol y hace algo más, pero Laura y yo… ejem.

Total que llego a la aduana y de puta madre, al madero de turno no se le ocurre otra cosa que registrarme la mochila por completo, yo de mala hostia diciéndole si pierdo el vuelo me lo pagas tú? Qué pasa si pierdo mi vuelo, que no tengo tiempo joder!!! Y el tipo con toda su tranquilidad y parsimonia diciendo, abre este bolsillo, esto qué es? Y esto? Y la verdad es que casi hubiera preferido que me confiscara algo, porque me hizo perder el tiempo y al final metí una botella de cristal, sí, cristal, con una orquídea dentro y con líquido en su interior, y entonces uno se plantea, si no me vas a quitar las cosas que se supone que deberías quitar, para qué coño quieres revisar nada?

Pues total que con lo que tardé con el madero aquel perdí de vista a Laura y Rubén, así que nada, a correr sin rumbo aparente hacia donde supuse que estaría mi puerta de embarque, momentos de tensión, no les veo, deberían haber llegado ya, joder… bajo, avanzo.. miro… coño, ahí están, menos mal.

Embarcamos, y nada más subir al avión, en la cola también se olía, uno es perfectamente consciente de a dónde se dirige, todo el avión infestado (infectado también sirve, es una de las pocas ocasiones en que son sinónimos) de indios. Los indios en su educación “diferente” hacen lo que les sale de los cojones en el avión, abróchense los cinturones, para qué? Si eso aprieta, estén sentados, es que me apetece pasear, pongan sus asientos en posición vertical, pero así es más incómodo, y este zumo no me gusta, no lo tendrás de otra cosa… puaj. Es la hostia, montar en el avión y se acabó Tailandia, vuelta a India completamente.

Cuatro horas y media después aterrizamos en Bombay, Mecano se equivocaba, Hawai tal vez sí, pero Bombay no es un paraíso. Estuvimos de arriba abajo intentando conseguir un papel que dijera que Air India había suspendido su vuelo, nos mandaron arriba, a donde no sé quien, luego vuelta para abajo, aquí no es, vete allí (Astérix y las doce pruebas, para conseguir el formulario A-33 azul hace falta primero el B-52 verde)… total, que al final, y tras mucho discutir llegamos a un sitio donde había una señorita muy poco colaboradora que a regañadientes imprimió un papelito, y después de insistirle otro rato puso el sellito, de ahí ya nos podíamos ir a casa, esto parece la solución de una aventura gráfica tipo Monkey Island :D

De ahí a coger un coche hasta Pune, otro rato de discusión, como siempre, sabemos que cuesta 1500 Rs, es el precio más bajo que se puede conseguir para ir de Bombay a Pune, una vez casi conseguimos 1200 Rs, pero empezaron el viaje, nos dieron una vuelta y dijeron, chavales, por ese precio no se puede. Así que una vez que sabes que son 1500 ya te da pereza hasta discutir, es un rollo tú y yo sabemos que son 1500, así que te doy tu dinero, tú me llevas y ya está, nada que discutir, pero ellos insisten, supongo que nos ven rostro pálido, e intentan estafar lo que puedan, pero nosotros para eso les salimos rana siempre. Sólo como ejemplo, por no pagar diez rupias de más (unos veinte céntimos) nos vamos andando un largo tramo :D

Pues nada, de ahí a casa, y al día siguiente vuelta al curro, a partir de ahí nada especial… o sí?

Sed felices :D

SSergio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Soy la otra parte de ¨El club de los masajes¨ y tengo que reconocer que a mí realmente sólo me gustó el masaje número dos!!! El resto hubieran sido para mí prescindibles, pero no el número dos, que fue una de las mejores cosas que se me ocurrió hacer en Tailandia.

Como comentarista del masaje número cuatro, tengo que decir que el lugar al menos estaba mejor que el número tres (pero no que el número dos). Era más agradable, no parecía tanto una cama de hospital en la que te iban a operar. El lugar para mí te mete en el ambiente.

La novedad de este masaje número cuatro es que cuando estabas boca abajo, podías poner la cabeza recta, ya que tenías un agujero en la cama para respirar, cosa que para mí resultó bastante incómodo.

Sobre lo del Rolex, ejem, ok, yo soy la persona que pagó 300 baths por un Rolex falsísimo, lo que significa que me podría haber comprado cuatro con lo que tú pagaste. Sí, es mi secundero el que no funciona como el resto de los Rolex verdaderos... Pero, ejem, creo que no te voy a decir nada porque el destino de alguna forma que ya conoces lo ha hecho por mí.

Sin más, yo puedo decir que estoy orgullosa de mi Rolex falso. Ahora mismo, no estaría dispuesta a pagar más de 300 baths por un reloj.

Sobre todo lo demás, corroboro que me costó correr hacia la puerta de embarque, pero correr para qué? Hubiera sido una desgracia perder el avión?

Tal vez fue el inconsciente. Pero si yo ya tenía planes por si lo perdía... Hubiera vuelto a ver a mi masajista número dos, sin duda.

Lau