viernes, 3 de agosto de 2007

Day 02: 22nd JULY - CHIANG MAI (part II)

Montar en patera de bamboo por el río, que llovía y todo
Ir a ver show de monos
Mujeres jirafa
Disparar con escopeta, revolver, pistola, metralleta cutre y Glock
Bungie jumping desde 50 metros
Final redondo con un masaje tradicional Thai que me devolvió la felicidad al menos por un rato largo :D
Cena junto al río

Bueno, pues he vuelto, con ganas de escribir, cada vez me gusta más esto de escribir, algún día os hablaré de la escritura automática, concepto que me presentó Laura hace algún tiempo, es una maravilla, pero eso para otro día.

Volvamos al 22 de Julio, recordatorio para mentes difusas como la mía, acabamos de comer comida Thai, y después… pues después lo que viene ahora :D

Después de comer empezó a llover, no demasiado, joder con el monzón, no llega nunca, para mí que es mentira, es un invento de los rusos y americanos.. bueno, total, que como estaba lloviendo Pi-kun (vuelvo a escribirlo mal xq todavía no he mirado cómo se escribe bien) pues nos dejó unos paraguas, muy maja ella :D y nos fuimos a dar una vuelta en patera de bambú por el río. Era una de esas típicas balsas hechas con bambú atado que supongo que alguien habrá visto alguna vez por ahí. Por cierto, en la propaganda decía bambú rafting, pero era más bien un paseo por el río, tipo paseando a miss Daisy, sentaditos, tranquilamente, con un tipo que rema delante y otro detrás.

El remo era otro palo largo de bambú, bueno, no era remo, no se rema técnicamente, se impulsa la balsa con ayuda del palo ese de bambú. Pues bien, en un arrebato de inconsciencia del remero (que no ramero) nos dejó remar un poco a nosotros. Craso error, cuando cogí yo el bambú ese no se me ocurrió otra cosa que impulsar la barca desde la parte de adelante, bueno, resumiendo casi nos quedamos sin remo xq la el remo se quedó clavado en el fondo del río y a la barca le dio por pasar por encima :D por suerte no me puse cabezón, y en lugar de tirar hacia arriba dejé que la barca me devolviera el remo tranquilamente por un lado :D luego remaron tb un poquito todos estos, es que estaba bien joder :P

Después de la vuelta en la patera de bambú tocó ir a ver un lamentable espectáculo, el show de los monos. Cada vez que veo algo de esto me voy dando cuenta de qué poco me gusta todo el rollo ese de obligar a los animales a que hagan cosas humanoides para el deleite del gran público.

Fue entrar en el sitio y ver un mono que hacía el mono en una rama, y en plan uy, qué chulo, pero qué curioso, no? Hace piruetas siempre en la misma rama, y no se escapa? Pues no…. Y por qué? Anda, igual porque está atado con una cadena a la rama..¿

Luego entras dentro y más cositas bonitas, un mono atado del cuello a un eje y dándo vueltas continuamente alrededor de éste, totalmente zumbado, muy chulo tb. Una vez dentro empieza el espectáculo, tal vez la parte más interesante es cuando enseñan cómo trabajan los monos para los humanos, se les enseña a que suban a los cocoteros, giran los cocos hasta que se sueltan y luego su dueño los recoge. Bueno, ni tan mal, animales para trabajo, eso es algo que existe de toda la puta vida. Luego ya viene lagilipollez, vamos a vestir a la mona de seda, que aunque mona se queda queda muy mona, le ponemos un carrito de la compra y le enseñamos a recoger los cocos, qué chulo, eh? Mira mira cómo hace la compra… Luego un par de chorraditas más, un voluntario (yo) para salir a hacer el mono, pero al final era sólo para que me pongan una manta escocesa y al mono sobre mi regazo, cuando iba a estirar la mano para tocarlo me dijo el señor tailandés, don’t touch, pues vaya, qué divertido entonces.

Bueno, pues se acabaron los monos, y de un circo a otro señora!! Cuando estaba por allí me acordaba de las palabras de Rosa que me transmitió Imanol, las mujeres jirafa no son un circo. Se equivocaba. Según entendí la tribu esta, cuyo nombre no me sé por lo que les tengo que llamar mujeres jirafa aunque me suene despectivo, son refugiados de Birmania (ahora Myanmar) en Tailandia, por algún rollo religioso supongo o por algo similar tuvieron que huir de su país, y acabaron en Tailandia. Hasta aquí bueno, una historia más de tantas que suceden en el mundo. Aunque no es todo tan horroroso, creo que viven tb en un poblado a un día andando por la selva haciendo lo que sí es su vida, lo que vimos nosotros sí que es triste.

Básicamente es una especie de parque temático donde vive una pequeña comunidad de los tribales estos, tienen unos campos de arroz, unas cositas a pequeña escala, está chulo si no piensas en la mierda que se intuye alrededor de todo aquello. No sé, ves la parte nekazari, campesinos a la antigua usanza, pero luego ya entras en lo que es el poblado, que es una calle larga con casas a los lados, y ves a las mujeres estas sentadas haciendo telas o lo que sea. Nos paramos a hablar con una, y realmente lo que más me impactó fue que apenas pueden hablar, es bastante triste.

Se ponen un anillo más cada año, creo que empezaban sobre los 16 o así, en plan cuando la niña se hace mujer o alguna cosa de esas. Luego cada año se ponen uno, y el máximo creo que era de unos 27 anillos. Por cierto que no son anillos sueltos, yo pensaba que sí, si no que se trata de una barra larga que van enroscando alrededor del cuello. La calientan para darle forma y la van colocando vuelta a vuelta en el cuello de la mujer.

La historia de por qué llevan eso no me convence, según lo que yo creía se lo ponían sus maridos para que si por lo que sea hay adulterio o sin más, se aburren de ellas pero su cultura no les permite separarse, pues se lo quitaban, se les jodía el cuello y problema solucionado.

Pero no es así, había fotos de las mujeres con los collares quitados, se los quitan una vez al año o así para limpiarlos. La teoría que nos expuso la guía, una de las teorías, era un poco… absurda? Se supone que en la zona donde vivía hay muchos tigres, y que se les pone eso para protegerlas, porque como todo el mundo sabe los tigres sólo atacan a las mujeres, nunca a los hombres, y siempre van al cuello, son TAN afortunadas por poder llevar eso… Nos contó dos historias más de príncipes y princesas que no recuerdo.

Y después el sueño de todo hombre, disparar con armas de verdad!!! Es coña. No es el sueño de todo hombre, al menos no es el mío, pero sí que me picaba la curiosidad de saber lo que es, qué se siente, cómo es el retroceso, todas esas cosas de las que has oído hablar en tantas pelis y no sabes qué son exactamente.

Probamos con cuatro armas, escopeta, revólver, pistola y una metralleta (aka subfusil o como lo quieran llamar los pros de todo esto). Empezaré por la ametralladora, era del calibre 22 si mal no recuerdo, lo que quiere decir que era como pif pif pif, como dice la jerga popular, menos fuerza que el pedo de un maricón :P eso fue un poco sin más, unos veinte tiros en ráfaga, pero casi no notabas el arma en las manos.

El revólver era interesante, tienes que amartillar el arma en cada tiro, con peso suficiente para hacer los disparos precisos, no está mal.

La pistola se hace bastante diferente al revólver, es similar en cierto aspecto pero al ser semi automática se hace diferente. Por cierto que la mía se me encasquilló en el último tiro, así que el tipo sacó la bala, la metió directamente en la recámara, me miró, y me dijo, “one more”.

Luego la escopeta, igual lo más impactante (habéis pillau el doble sentido :P) le di un grandioso tiro en la cabeza al muñequito ese. Me llevé el papel con el muñeco y sin la cabeza para casa, lo tengo por ahí todavía.

Cuando ya se había acabado nuestro elixir de pólvora vino Ibon diciendo, he cogido unos tiros con la Glock, y ahí sí que fue gozada, diez tiros seguidos, una nube de pólvora delante, y un monigote acribillado delante. Bah, sin más no es la hostia lo de los tiros pero es curioso, mi curiosidad ha sido satisfecha.

Para seguir un poco con emociones, pues qué mejor que hacer bungie jumping o como se escriba eso, 50m, no es la hostia, pero acojona un poquito, hay video por ahí, gracias a Ibon que llevó la cámara. Estuvo bien, el tipo me dijo, si quieres tocar el agua tírate hacia abajo, si no salta hacia delante. Me tiré hacia abajo, pero no llegué, me quedé con las ganas, pero estuvo muy chulo. Aunque es curioso que la sensación que tienes durante la caída no es placentera, es una sensación más bien inquietante, como de falta de control, no sé cómo explicarlo, es un tanto ansiosa, no sé. Luego sí, cuando caes y te balanceas de los pies sí que es una gozada, merece la pena.

Y qué mejor para acabar el día que un masaje Thai tradicional? Aunque hubo opiniones dispares para todos los gustos mi ángel masajeador supo hacerme feliz :D. Como bien dijo Ibon, creo, más que thai parece jay, pero bueno, si sabe hacer lo que tiene que hacer, y joder si sabía. Lástima que no haya fotos de mi cara de después del masaje :D

Para acabar cena junto al río, un sitio así bastante chulillo, con un embarcadero y tal y cual, y como esto se está haciendo un poco largo pues como que poco más que contar.

En resumen un día completito, de puta madre la verdad
Y en el siguiente…. Mámámámámámááaaaaaaaaaaaaaaaaassssssssssssssss

Sed felices peques :D

SSergio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jo, me has hecho recordar a mi mejor masaje... aunque el mejor mío, como bien sabes, fue en Bangkok.

Por cierto, en mi clasificación de masajes, el masaje de Chiang Mai ocupa el último puesto!!!

Quiero volver al Burberry!